Archives for posts with tag: Taoísmo

perspectivaA los/as interesados/as por la sexualidad taoísta/tántrica, les recomiendo la película No mires para abajo de Eliseo Subiela («El lado oscuro del corazón», «Despabilate Amor»…).

Para quien sepa mínimamente de que va el tema entenderá las enseñanzas, guiños y citas que hay a lo largo del film, y obviará el contenido más explicito (aunque me parece bastante bello y «antiporno» como pretendía el director).

Para quien no, pues le pasará como al de la crítica de Soitu que se entera de misa la mitad, y ni eso. Esta crítica está mucho mejor.

Premio Mejor actriz, Mejor actor, Mejor Película y Premio del Público del Festival de Madrid ¡?… entre otros.

Abstenerse argentinofobos…

Algunas citas:

«…y las gentes piensan que las naves [refiriéndose a los ovnis] van a venir de fuera…»

la cita es más larga e interesante, pero dejémosla ahí. Más citas, «agárranse los machos»:

«Todas las debilidades del hombre cabe atribuirlas a formas defectuosas de amar.»

que es en realidad de Su Nu Ching, la muchacha sencilla.

«Si me amo, te amo, y si te amo, me amo.»

del poeta afgano Rumi. Y para las personas que estáis lejos o las que sufren con la temporalidad del amor (como de otras tantas cosas):

«En la vida estarás siempre diciendo adiós. Que eso no te impida amar.»

Al final, y explicándolo para las/os más «agrícolas», el «truco» principal está en retrasar el espigado… o explicado para todos los públicos, el truco está en prolongar nuestra vida amando ¿Qué más se puede pedir?

Que ustedes lo disfruten…

tao linealContinúo con otro de mis artículos lleno de intuiciones, observaciones, lecturas, razonamientos y vivencias muy personales, y poca argumentación científica "clásica" por mi parte. Que cada una/o se cree su propia opinión.

Y continúo también con el tema de la sexualidad y el taoísmo.

Tengo la sensación de que ya he escrito esto antes, y es por que he hablado bastante del tema con amig@s últimamente. Da gusto, el texto, sale solo.

Mi tesis en este caso, así a grandes rasgos y un poco burdamente, es que la inactividad mental y/o física produce la muerte, más bien suelo decir, que la pereza física y/o mental nos produce a la larga la muerte y hay que tratar de mantenerse activo/a con la edad todo lo posible.

Quien no conoce el caso de esa pareja de ancianos que viven para cuidarse el uno del otro y en cuando uno de ellos muere, su pareja le sigue al poco tiempo.

También recuerdo como mi abuela materna, una gran mujer en todos los sentidos fue perdiendo capacidades con la inactividad.

Adoro ver a personas muy mayores que se mantienen totalmente activas. El arquitecto Niemeyer rondando los 100 años, sigue envuelto en mil proyectos y se acaba de casar de nuevo.

La petite mort

Nuestra vida se simplifica a un nacer, crecer, reproducirse y morir. Lo siento, no nos diferenciamos de otras especies. Y cuando la penúltima etapa se completa, ya poco nos queda que hacer por estos lares. Hay que buscarse excusas, citando de nuevo el guión de Lugares Comunes:

El lúcido puede seguir viviendo mientras conserve el instinto de la especie, el impulso vital. Es muy posible que con los años esa fuerza instintiva y oscura se pierda. Es necesario entonces apelar a algo parecido a la fe. Hay que inventarse un motivo, una meta que nos permita reemplazar el impulso animal que se ha perdido por una voluntad fríamente racional.

¿Y por qué perder el impulso animal? ¿por qué no extenderlo?

Y bueno, los antiguos taoístas, grandes observadores y estudiosos de la longevidad en todas las facetas de la vida, mantenían que una vida sexual activa en la vejez contribuía a la longevidad. También una alimentación equilibrada, y otras cosas. Pero ahora vamos a centrarnos en la sexualidad.

Y mirémoslo así. Si prolongas tu etapa sexual (léase pseudo-reproductiva) durante la vejez, claro, tu cuerpo se siente con un gran objetivo para mantenerse en activo.

Centrándonos en el hombre, para los taoístas, si según envejeces eyaculas con una periodicidad cada vez menor, con la edad mantienes una vida sexual activa y favorece la longevidad. El "Cultivo de la energía vital".

En mi opinión, durante la eyaculación, das lo mejor de ti (incluso una parte de ti) para dar vida, para crear vida. Al no producirse la eyaculación además de un ahorro brutal de energía, lo que se origina también con tu pareja es una mayor pasión, un replanteamiento del fin del acto, que bien llevado (ignorando la eyaculación como objetivo) mejora también tu relación de pareja.

Para mi todo, por lo que me ha tocado vivir, tiene mucho sentido. Por poner un ejemplo, para mi han quedado lejos o muy ocasionales esos días de desgana y pereza, que durante años ha sido la normalidad.

Siento escribir desde una posición masculina, pero es desde donde puedo hablar.

Rizando el rizo

Y ahora voy a intentar unir la temporalidad del enamoramiento con la sexualidad taoísta. Cito un párrafo de la wikipedia, hablando del control de la eyaculación (Coitus Reservatus):

The primary purpose of karezza is the maintenance, and indeed intensification, of desire within the context of long term relationships. According to Stockham, it takes two weeks to a month for the body to recover from ejaculation. If ejaculation is experienced more frequently, the effect is to ‘drain the basin’ before it has been replenished. This, in turn, induces feelings of irritation and rejection of the lover, as the body seeks to prevent further ejaculation. However, and arguably especially in modern Western culture where ‘more is better’, people often pursue orgasms, and therefore ejaculations as a way of trying to overcome those feelings, thus compounding the problem. The result is that over time – and reportedly within two to four years – the ‘honeymoon of desire’ is over, leading to substantial change in the nature of the relationship. Stockham’s advocacy was that this same ‘honeymoon period’ could be maintained in perpetuity through limiting the frequency of ejaculation.

Solo comentar, que este último párrafo casi no puedo opinar desde la experiencia, ya que mi experiencia ha sido siempre la temporalidad. Ya veremos que sucede en unos años… el tema promete, aunque la perpetuidad… en fin…

Concluyendo

Cierro con una cita de Alejandro Dolina de sus "Crónicas Del Ángel Gris":

Admitía que la pena de amor conducía al arte. Pero también sostenía que el propósito final del arte es el amor. La recompensa del artista es ser amado.
(…)
Los autores de aforismos extrajeron de estas realidades una conclusión modesta: si no fuera por el amor, nadie haría gran cosa.

Substituye arte y artista por lo que más te apetezca: filosofía/filosofo, activismo/activista, oratoria/orador, escritura/blogger, etc. Sí, Dolina es ese presentador de radio argentino y también escritor que decía:

Las mujeres son la causa de todas las acciones de los hombres. Hablo porque hay mujeres escuchándome.

Genial…

En resumen, hay que mantener la actividad física/mental durante toda la vida… y por supuesto la actividad amorosa 😉

jing jangEstaba mirando unos bastoncillos para la limpieza de oídos cuando me han entrado ganas de escribir este artículo de una vez. Va sobre nuestra naturaleza humana, y un poco sobre autogestión de la salud.

Explico lo de los bastoncillos. Recuerdo algo que me sucedió en el patio del colegio cuando tenía diez o once años, cuando algo parecido a una abeja, no tuvo mejor idea que meterse en mi oído izquierdo. Tras unos minutos de disimulado pánico por mi parte, y de agonía por parte del insecto, este quedó inmovilizado en mi oído.

Cuando al rato conseguí sacarlo sin mayores consecuencias, no daba crédito a su tamaño y aspecto, a lo que me había pasado, y a lo que me había impedido que la cosa fuera a más, el cerumen.

Desde entonces, "limpio" mis oídos con moderación. Me acuerdo que una amiga se reía de mi campaña "pro-cerumen" (quizás como tú que me lees) hasta que le paso algo parecido en un viaje juntos. Sufrir puede llegar a ser bastante pedagógico.

Y es que nuestro cuerpo, muchas veces en contra de lo que pensemos nosotr@s, es sabio, ya que es que es fruto de una larga evolución de unos milloncitos de años.

Pero lo olvidamos casi siempre, y nos dejamos llevar por modas, por credos, por supersticiones, por nuestra cultura, y por otras gilipolleces varias.

Y así nuestra vida esta llena de sinsentidos y de represiones de nuestras conductas naturales. Vamos con unos ejemplos:

Sudar es un horror, una vergüenza, lo bueno es oler a químicos o a algo que parezca flores. Usamos desodorantes de dudosas repercusiones para nuestra salud. Y parece que es el olor corporal el que nos hace elegir la pareja con un sistema inmunológico más diferente al nuestro (lo que hace a nuestros descendientes más resistentes).

Pero sigamos…

No podemos bostezar o esperazarnos, que es de mal gusto.

No podemos eructar o peernos, que también está mal visto (en occidente). Por más que nos lo pida nuestro cuerpo, nos aguantamos. Nuestros aires internos se deben desintegrar mágicamente.

Otro ejemplo que me encanta es la gente que estornuda taponando todos sus orificios, e intentando no hacer ruido. Un día se les va a salir un ojo, se les va a levantar la tapa de los sesos, o yo que se.

Como decía, tenemos que tener nuestros oídos y nuestras fosas nasales "limpias", sin pelos, y sin substancias segregadas por nuestro cuerpo. Aunque nuestra nariz sea un filtro y acondicionador del aire que respiramos. Aunque nuestro oído se limpie y proteja con el cerumen.

Alucino cuando veo a personas con esas gafas de sol ridículas, de tamaño y patillas extravagantes. Recuerdo hace poco estar una terraza y que casi la mayoría de las mujeres las llevaban, y que casualidad, ningún hombre. Ah, estábamos a la sombra. Uy sí, la luz, que horrrorr… Tengo unas para la nieve.

Nuestra piel, perfectamente acostumbrada a defenderse de agresiones externas, tiene un nuevo enemigo, el gel, la esponja y otros abrasivos varios de uso continuado. Y claro, las alergias se convierten en algo normal.

Este ejemplo me gusta especialmente: Nuestros pies, los aislamos del suelo con "aislantes de goma" (algo único sin precedente en nuestra historia evolutiva), y nos pasamos el día recibiendo y almacenando cargas eléctricas (artificiales o naturales). Cuando nuestra cabeza dice que no puede más, pues lo de siempre, pastilla al canto. Pero andar descalzo por supuesto no! Personalmente, ando todo lo que puedo descalzo, y cuando me calzo, pues es como cuando me pongo guantes en las manos, me canso y me agobio rápido.

Si nuestro cuerpo decide endurecerse en las manos o en los pies y nos sale una dureza, que horror, piedra pómez o corremos a quitárnosla al podólogo.

Si estamos cansados y el cuerpo nos pide descanso, pues tomamos excitantes para disimular el cansancio. Pero una siesta o dormir, no, claro.

¿Qué tenemos un dolor muscular?, pues usamos alguna droga para mitigar el dolor, y así seguir usando nuestro músculo como si no pasase nada. Igual forzamos el músculo, pero como ya no duele…

Por aquí lo habitual es parir en horizontal y en Brasil es más barato tener hij@s por cesárea. Eso del parto natural, es un engorro… A los médicos que lo recomiendan tendríamos que obligarlos a defecar en horizontal o por cesárea, a ver si entran en razón.
 
En Corea del Sur, muchísima gente se opera los ojos para parecer occidental (se supone que somos más guapos/as). Con los años, tienen que retocarse de nuevo, porque los ojos tienden a volverse de nuevo rasgados.

Como siempre digo, somos una generación de sordos, y es que en mi opinión, nuestros oídos no están diseñados para tanto ruido. Yo lo primero que hago cuando entro a un concierto o a un pub/discoteca es colocarme unos tapones improvisados de papel. Escuchas la música, te comunicas sin problemas y te ahorras el zumbido en los oídos después. A mis amigos les hace gracia, pero mis oídos lo agradecen.

Si tenemos problemas de erección, pues químico al canto. No solo es útil para gente mayor, si no también para jovencitos alcoholizados/drogados que no dan la talla.

Y ya el colmo, los testículos, sí, esos órganos perfectamente diseñados para mantener una temperatura óptima a veces alejados del cuerpo … pues nosotros venga, a marcar paquete y a fastidiar el invento.

Y la cosa no queda ahí, está claro que nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos, pues muchos de nosotr@s nos queremos saltar el penúltimo paso no se muy bien porqué (una amiga decía que quería "disfrutar la vida"), y con ello nos saltamos una de las mayores fuentes de felicidad. Sí, nuestra psicología también es fruto de una evolución, nos guste o no.

Eso sí todo en aras del progreso, del culto al cuerpo, del mercado, de la modernidad…amen. Todo muy racional…

Como siempre, hay que cuestionar un poco lo que hacemos, lo que consumimos y no simplemente dejarnos llevar por lo que hace la masa o lo que nos mandan.

Ah, muy recomendable el libro de Eneko Lanuza "Cuidate Compa".

En fin, me voy al sobre, que es lo que me pide el cuerpo.


Según el DRAE:

natural.

(Del lat. naturālis).

1. adj. Perteneciente o relativo a la naturaleza o conforme a la cualidad o propiedad de las cosas.
(…)
5. adj. Dicho de una cosa: Que imita a la naturaleza con propiedad.

PD: Sí, ya se, no por ser natural, tiene que ser bueno para nosotr@s. La cicuta es algo muy natural …

Hace varios años que estoy fascinado con el Taoísmo.

Como comencé a conocerlo por el Tao de la Sexualidad (y por analogía con el Tantra de la Sexualidad), voy a empezar escribiendo sobre este aspecto y finalmente lo desarrollaré un poco más en este mismo texto. Más adelante, según sigo aprendiendo, supongo que escribiré algo más.

Para mi el descubrimiento del Tao del Sexo fue un punto de inflexión entre un prepotente «a estas alturas lo sé casi todo del sexo» en el que me encontraba hace cinco o seis años, a pasar a un sorprendente «no se prácticamente nada y para empezar ni me conozco a mi mismo».

Recuerdo escuchar entrecortadamente una conversación en la que una persona mayor, en un restaurante vegetariano, intentaba explicar a una pareja joven lo fascinante que era para él, el Tao del Sexo, ante la pasividad y poco interés de la joven pareja. Muy gráfico y muy familiar.

Lo que realmente descubrí hace unos años es que saltando la barrera del convencionalismo sexual occidental (que por mucha imaginación que le eches y por muy habilidoso que seas, no va más allá del mete y saca, pin pon pan), descubres que tu cuerpo y tu mente pueden ir mucho más allá, y que de la película, te has enterado de la mitad.

Para mi todo esto resultó un hack (perdón por usar este término informático) mental de lo más interesante.

Como llevo tiempo hablando con amigos/as sobre el tema, y la conversaciones suelen ser parciales, voy a escribir algo aquí al respecto en base a mis experiencias y a mi aprendizaje actual.

Para ello voy a usar al principio dos símiles: la cocina y la música.

Cocina

Para mi la visión de la sexualidad Taoísta frente a la sexualidad común occidental, se puede comparar con la cocina: se le puede dedicar más o menos tiempo, puedes tener más o menos habilidades, puede ser más o menos saludable y puedes ser un buen cocinero o uno mediocre. Puedes comer para salir del paso o puedes recrearte cocinando durante horas y horas, y cuando esto sucede muchas veces lo de menos es comer, es más reconfortante todo el proceso.

En mi opinión la sexualidad común occidental es a la sexualidad oriental Taoísta, lo que la comida rápida a la buena cocina.

Quizá el punto más grotesco de la sexualidad occidental sea para mi el porno. Con contadas excepciones, es ese modelo de sexualidad cutre, machista, aburrido, previsible, vacío que nos meten en la cabeza como si fuera lo mejor del mundo, el pensamiento único, The American Way of Fuck. Pero no deja de ser comida basura, cultura basura, valores basura. Y es triste cuando te vas encontrando a personas decepcionadas, insatisfechas, en mi caso del sexo femenino, que piensan que el sexo es eso y nada más y se intentan ajustar a ese único papel con resignación y como buenamente pueden.

Siguiendo con el símil de la comida, para mi el sexo está siempre muy ligado al amor, al cariño, al afecto, aunque esto es algo bastante personal. Para mi tener sexo sin cariño, es como comer cuando estás resfriado, comer lo que se dice comer, comes, pero te pierdes mucho y nunca se saborea igual. Comes, y sales corriendo saciado. El Tao, desde mi punto de vista, potencia mucho el amor, el afecto, el cariño en cualquier relación. Igual que se afina el paladar.

Musica

Pero una vez que superas esa barrera de la que hablaba al principio, te das cuenta de todo lo que te queda por aprender. Creo que un buen símil para describirlo es comparar el aprendizaje del Tao de Sexo con el aprendizaje de la música.

Ninguna persona nace sabiendo tocar un instrumento, pero si tienes interés puedes desarrollar habilidades musicales de una forma fascinante. La mente, el cuerpo, son muy maleables y hacen con entrenamiento cosas fantásticas.

Cualquiera puede ponerse a cantar, pero para hacerlo de una forma profesional, hay que tomárselo en serio y realizar cierto aprendizaje. Con el sexo taoísta pasa lo mismo.

Cuando aprendes a tocar un instrumento como la guitarra, educas y fortaleces las manos, la mente, estudias y conoces el instrumento. Durante una primera etapa te dedicas a entrenar sistemáticamente tu cuerpo para que siga un método, una partitura, para que tu cuerpo y mente se adapten al instrumento, para conocerlo en profundidad. Pasada esta etapa, tocar es algo que se hace sin pensar (o mejor dicho usando el otro hemisferio de cerebro).

El Tao también requiere que te desarrolles mentalmente y físicamente. Hay un proceso de aprendizaje de tu cuerpo, de tus reacciones, de tus procesos mentales, realmente apasionante y que yo desconocía por completo.

Pero para empezar a tocar con un grupo, es mejor que practiques primero en solitario, y cuando tengas suficiente soltura y confianza empieces a tocar en grupo. También podéis aprender al mismo tiempo. Pero lo importante es que tienes que conocer bien a tus parejas, saber como tocan, sus ritmos, como acompañar, y como llegar a esa sincronización, en el que llega un momento que tocáis juntos con soltura. Para esto tiene que haber mucha comunicación.

Me sucede que cuando le hablo a una mujer sobre el Tao del Sexo, enseguida le resulta interesante, y quiere descubrirlo rápidamente. Pero no se aprende a tocar un instrumento en dos días. Dicen que se tarda bastantes años en aprender el Tao de la sexualidad en tu propio cuerpo y otros tantos en conocer a tu pareja, y visto lo visto estoy de acuerdo. Eso sí, lo que he sentido, lo que ha experimentado mi mente, el aprendizaje desde el principio, me está fascinando completamente.

Aprendizaje

Hacer este camino sin ningún apoyo, sin estudiar solfeo, me resulta complicado por no decir imposible. ¿Por qué tratar de descubrir solo lo que los orientales ya llevan desarrollando unos miles de años?. Evidentemente no hay que usar sus enseñanzas a pies juntillas, puedes y debes experimentar, pero creo que es una base imprescindible.

Dejando ya los símiles, añadir que tradicionalmente esta era una enseñanza que en China con toda naturalidad, pasaba generación a generación, bien documentada en los que en algún sitio llaman "libros de almohada", sin tabues, todo lo contrario a nuestra por siglos lastrada cultura occidental.

Afortunadamente, hay mucha lectura relacionada. Personalmente recomiendo los libros que tiene un pie en Occidente y otro en Oriente y nos hacen las explicaciones más cercanas, muchas veces regadas con referencias a modernos estudios de sexualidad que no hacen sino confirmar lo que en Oriente se sabe desde hace miles de años. También son recomendables los textos clásicos, si puede ser, comentados.

Ligado al Tao y al Tantra hay toda una capa "mística". Esto, como todo, es a gusto de cada persona, pero si sabes leer, hay otra capa de una "lógica" bastante aplastante. Para quien le interese esta faceta, le recomiendo El Tao de la Física de Fritjof Capra, y el delicioso y divertido Silencioso Tao, Reflexiones de un científico al otro lado del espejo del matemático lógico Raymond M. Smullyan.

Feminidad

Quizá lo que más me gustó del Tao de la sexualidad, es que es un planteamiento que subraya el papel de la mujer, la visión de esta, su fortaleza, sus valores, sus emociones, y el hombre está, en mi opinión, más al servicio, más en un segundo plano, controlando todo ese derroche de energía que le caracteriza para usarla con más sabiduría para encontrar una armonía con sus parejas. El agua, vence al fuego.

El culto de lo Femenino, es un subtítulo de un libro de Tantra que conocí por el programa Local de RNE3, y creo que resume de una forma hermosa este aspecto de la sexualidad en el Tao y del Tantra. Pero esto llega mucho más allá de la sexualidad:

«Finalmente, el Tantra ve en la represión de los valores femeninos, llevada a cabo por la civilización patriarcal, la causa oculta de la crisis del mundo moderno. Afirma que sólo el culto de lo Femenino y sus valores puede permitir ese auténtico cambio en la sociedad que el ser humano necesita para enfrentar los desafíos de nuestra época.»

Tantra, el culto de lo femenino. André Van Lysebeth

En la misma línea:

«Los taoístas propugnan una vida en completa armonía con las grandes pautas de la naturaleza, y veneran la feminidad precisamente porque las mujeres, por naturaleza, están mucho más cerca de las fuerzas primordiales del cosmos que los hombres.»

El Tao de la salud el Sexo y la Larga Vida, Daniel Reid

y en el prefacio de El Tao de la Física de Fritjof Capra (1975):

«Ahora veo ese interés como parte de una tendencia mucho más amplia, que trata de contrarrestar el profundo desequilibrio existente en nuestra cultura, en nuestros pensamientos y nuestros sentimientos, en nuestros valores y actitudes y en nuestras estructuras políticas y sociales. La terminología china del ying y el yang me pareció muy adecuada para describir este desequilibrio cultural. Nuestra cultura ha favorecido los valores y actitudes yang o masculinas y ha descuidado sus contrapartes ying o femeninas, que le son complementarias. Hemos favorecido la autoeliminación a costa de la integración, el análisis sobre la síntesis, el conocimiento racional sobre la sabiduría intuitiva, la ciencia sobre la religión, la competencia sobre la cooperación, la expansión sobre la conservación y así sucesivamente. Este desarrollo parcial ha alcanzado ya un punto alarmante, ha llegado a constituir una crisis que presenta dimensiones sociales, ecológicas, morales y espirituales.
No obstante, al mismo tiempo, estamos siendo testigos del inicio de un tremendo movimiento evolucionario, que parece ilustrar el antiguo refrán chino que dice: "Cuando el yang ha alcanzado su punto culminante, retrocede dejando paso al ying". Las décadas de los años 60 y 70 generaron toda una serie de movimientos sociales que parecían converger en una misma dirección. La creciente preocupación por la ecología, el intenso interés por el misticismo, el surgimiento de la conciencia feminista y el redescubrimiento de los enfoques holísticos sobre la salud y la curación, son todas manifestaciones de una misma tendencia evolucionaria.  Todas ellas vienen a contrarrestar el excesivo énfasis puesto en lo racional, en las actitudes y los valores masculinos y tratan de recuperar el equilibrio entre los aspectos masculino y femenino de la naturaleza humana. Así, la conciencia de la profunda armonía existente entre la visión del mundo de la física y la del misticismo oriental, aparece ahora como parte integral de una transformación cultural mucho más amplia, que nos lleva a una nueva visión de la realidad, visión que requerirá un cambio fundamental en nuestros pensamientos, en nuestras percepciones y nuestros valores.»

Para resumir y para aclarar un poco el tema de la dualidad Yin y Yang en este marco, digamos que la sexualidad occidental (y nuestra cultura) está tremendamente desequilibrada actualmente hacia el lado masculino, al contrario de la sexualidad taoísta. Y así nos va.

Pero insistiendo en el refrán chino: «Cuando el yang ha alcanzado su punto culminante, retrocede dejando paso al yin». O como decía Lao Tse en su Tao Te Ching:

Cuando las cosas alcanzan su extremo, comienzan a declinar.
Eso es oponerse al Tao.
Y lo que se opone al Tao camina rápidamente a su fin.

Y cada vez estamos más cerca de ese punto culminante o de ese declinar. Por mi parte sigo aprendiendo (sobre cocina, música, sexualidad, etc, etc).

Disfrutad …

This work by vjrj is licensed under a Creative Commons Attribution-ShareAlike 3.0 Spain.